Si bien fue una visión aún invernal me pareció de lo más inspirador. Deseé por un instante un poco de solecito y zaz, la respuesta a ello la encontré en la otra ventana. Ahí estaba, haciéndose paso entre las pesadas nubes. El astro rey. ¿Puede ser mejor mi día? Me pregunté. La rutina me lo confirmó. Sí, puede ser mejor. El café que bebí era de Oaxaca, pues Gloria se quedó conmigo el viernes. Así que el saborcito de los altos de Oaxaca me alucinaron el día. Una mezcla perfecta que se equilibra con un smörgås sueco.
Así, despúes de mi desayuno me apresuré a salir rumbo a la escuela. En el trayecto me marcó ST y nos dijimos lo mucho que nos queremos. Ahhhh, seguía expresando. Un beso y un te amo fue la despedida en el teléfono.
Llegué a la escuela y mi clase de inglés para negocios pintó bomba. Mi maestra es una irlandesa que emite una energía irresistible de no tomar. Me fascina esta escuela. Siempre hay buena vibra, ganas, compañerismo y diversión.
Creo que no hay más que decir, todo está dicho; qué no.
2 comentarios:
ya se extrana el sol. que bonita vista tienes. creo que somos vecinos :)
Pásame tu buena vibra Ró, desde Suecia para México...
Un abrzo.
MR.
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