5 de julio de 2008

Gaby, una más de ella... y la alegría llego


Me gusta mi blog por eso cuando no encuentro algo interesante que escribir y atenderle me frustra, me pone de malas y sólo doy vueltas al posible tema que escribiré sin concretar algo; que ya me sale una idea de cocina, que no porque es insulsa, que ya sobre algún tema científico, que no porque no soy experto en la rama, y así.

Luego recuerdo a Miguel y lo parafraseado por él según lo que le dijo su mujer, Luisa: siempre hay algo de que escribir. La pequeña diferencia es que Miguel es escritor y de los buenos y yo, un simple fanático de la expontaneidad en las letras. Pero este argumento siempre me atormenta, cuando no tengo nada que escribir me viene a la cabeza y me martilla pues tiene razón en toda la extensión de la palabra, aunque yo lo rediría con la siguiente frase es posible que siempre haya algo de que escribir.

Mis últimos post han sido sobre cómo me siento, de mi amor, sí, así, de que ando en el limbo, en el cielo y que sólo disfruto, la naturaleza marca que todo cambia pero no me preocupo por eso ahora. Quería dar una variante de ello pero seguía atrapado en que nada me parecía relevante, digno de contar sino hasta ayer.

Plack, sonó la rejilla del correo en la puerta del departamento, miré de reojo y ví un paquete que el cartero bien a bien hizo para que al caer no se dañara, era blanco, pensé que seguramente sería esta mamada de los bancos suecos por darte información de cuánto te están sangrando, así que no le preste mucha atención.

Seguía en lo mío, leyendo mi libro, el de Harry Potter, el último de la serie, mi buena suerte y 10 coronas que me costó su reservación, me permitió hallarlo en la biblioteca central. Total que, cuando me digné a poner el nuevo correo en su lugar me percaté que era para mí. ¡Chale! me dijé, ¿para mí, pues a quién mate?, me pregunté, pues no es usual que reciba correspondencia. Casi me vengo cuando ví que era de Gaby, sí Gaby mi chiquita, la que anda en Bélgica, en Bruselas, la niña que conocí en México vía mi amigo José Luis, quien trabajaba en Nissan México y al que bien tuvé el honor de bautizarlo como La Lucha o la pueb-Lucha (a), nombre de batalla en los tables de la Citá del Messico.

Como loca desesperada, que no me cuesta trabajo, abrí el paquete, que tampoco me cuesta trabajo, jiji. Eran tres discos: i) Aterciopelados, ii) cumbias y iii) rock de 1999 en español. ¡Madre mía!. Y la inspiración me llegó. Ya le he agradecido a Gaby vía messenger y entre tanto reconocimiento nos remontamos a aquellos años en los que se ejecutaba está música con bandas como La Cuca, La Castañeda, Fobia, Enanitos Verdes, Botellita de Jerez, Los Fabulosos Cadillacs, Los tres, Moenia, Santa Sabina, Molotov -¡Pinche Gringo frijolero!, Plastilina MOSH, entre otras. También me recordó que mi primo me decía Chuntaro por la rola aquella del Chuntaro Staí. Muchos pero muchos recuerdos como a JuanGa, José, José y sus versiones modernas hechas rock. Gaby dice que me envió los discos porque le recordé yo esa etapa con el vídeo de Zoé que dejé en mi bló.

Pero yo le agradezco más porque me vinieron a la mente los momentos en que nos ibamos a los antros gays en la Ciudad de México y bailabamos y bailabamos y bailabamos, nos embriagabamos, nos pegabamos, cuerpo a cuerpo, pero como yo le era inofensivo y a mi la papaya ni en licuado pues aquello era pura diversión. Recuerdo una noche en un lugar que se llamaba Caliente en la Zona Rosa, súper pequeñito el cual se llenaba, no podías andar, ni bailar, ni estar pero todos querían estar ahí, pues era el oasis para aquellos que no tenían mucho dinero y buscaban de diversión con cervezas baratas; con el tiempo el lugar se hizo más chick de lo que todos se esperaban, la gente impuso su sabor pero aún así le disfrutabamos, nos arrinconabamos todos los chicos del club, mis amigos, Gaby y yo, mucho bla, bla, risas y desveladas.

También recordé momentos cuando me largaba a la disco de moda entre los jóvenes de la época, la famosa La Diabla con su barra libre y sus interminables borracheras juveniles con amigas dolidas por los novios y yo, ahí. Recuerdo que también fue la primera vez que me gustó una chica y que ahora la puedo contar como mi mejor amiga de la prepa.

Así pues, los discos, Gaby y sus buenos deseos me llevaron a la cama con bastante alegría tanto que soñé con mi hermano. En el sueño mi hermano manejaba una compi-pesera, chafirete, puede decir uno, con su tablero de peluche, sus muñecos de lucha libre, su zapato del chamaco colgando del espejo retrivisor. Mientras se oye esa rola de en tus cáderas está la dosis perfecta... mi cuerpo necesita de tí.... Mi hermano es psicólogo y seguro me diría en este momento que son puras proyecciones. Pero eso no me impidió buscar más música en el youtube de cumbias, de spots con las luchas libres y sus estrellas "exóticas" a mi amigo Goichi Tanaka, mi amigo japonés radicado en México viviendo con su chica Raquel a la que aprecio mucho, a éste chico le bauticé como Goyo Tanaka, ahhh; luego, los polivoces y sus multiples personajes que me siguen maravillando sobre todo el de Gordolfo Gelatino y Doña Naborita, mi madre me decía de cariño Gordolfo Gelatino, jajaja.

Gaby, gracias, me inspirasté y me hicisté darme cuenta de que hoy, mi presente, hace memorías para ser contadas en mi futuro. Yo, yo sólo espero que tú que me lees te hayas divertido con éste post y que si te recordé algo le agradezcamos a Gaby. Seguro también haces historias que querras contar.

2 comentarios:

? dijo...

Que bueno que recibiste este regalo, a veces el recordar el pasado se vuelve un aliciente para seguir adelante, sobretodo cuando nuestras cirunstancias han cambiado radicalmente.

Saludos.

Lorena dijo...

Hola Ro,
que padre tener amigos asi, que se acuerdan de ti cuando menos te lo esperas!, eso quiere decir muchas cosas buenas de ti ;-)
Y si, si me he divertido con tu historia, muy buena, y muy bien narrada, como siempre, se te dá bien lo de las letras...a veces hay que esforzarse un poquito para escribir, pero ya nomas empiezas, fluye como el agua...asi que continúa, no dejes de hacerlo, lo haces bien, y como bien dices, siempre hay algo que contar..que escribir..
saludos y que tengas una buena semana